Tic-tac, tic-tac

Ayer antes de ir al concierto de Morrissey, tenía que ir a clase, al menos a entregar la tarea.
Estaba echada en el sillón del búnker, esperando que se acercara la hora de la clase cuando un compañero y amigo de la prepa (de los escasos con los que sigo en contacto) me contacta por teléfono (para ver si nos veíamos en la arena VFG) y entre otras cosas me contó que ya nació su bebé. Le platiqué que otra conocida (por que en no puede ser denominada como otra cosa) también de la prepa, ya parió a su hijita. Quedamos de vernos en la semana para conocer a la pequeña. La pequeña… pequeña… no pude no pensar en Mario y Constanza. ¿Porqué? Me parece curioso, asombroso, como mis amigos deciden, no solo formar una familia si no crecerla.
Y pienso como se me antoja y no se me antoja, y pienso en mis prioridades, y en mis deseos, y en mil y un cosas… y solo puedo concluir una cosa: está cañón esto del reloj biológico.